viernes, 11 de abril de 2008

La avenida de los pulloveres y los asaltos

La Avenida Juan B. Justo, se ha hecho famosa en los últimos años no solo por sus sweaters, su ropa y sus precios, sino por los constantes robos que sufren los comercios. Robos, asaltos a mano armada, motoqueros que rápidamente escapan con la recaudación del día de ciertos locales y muchas historias publicadas en los medios locales. Si bien cada vez hay mayor número de efectivos policiales, la delincuencia no deja de pasear por esta avenida.

Hace varios años que escuchamos hablar de múltiples robos en esta zona y ya sea con violencia o no, los empleados de los locales son sorprendidos y los delincuentes se dan a la fuga con dinero y/o mercadería. Después del verano se ha incrementado la cantidad de policías presentes en la zona en varias esquinas de la extensa avenida comercial. Sin embargo los asaltos no han amainado demasiado. “No sé para qué está la policía si nos siguen robando como si nadie controlara nada”, afirma Mariela Teijeiro, empleada de un local de abrigos en Juan B. Justo. Distintos comerciantes expresaron su disconformidad con el nivel de protección que tienen, más allá de los policías presentes en las esquinas. Muchos parecen dar el brazo a torcer y sostienen que la policía no es culpable sino que es la sociedad la que cada día genera más y más delincuentes. Otros más críticos culpabilizan a la policía y los denuncian como responsables de los robos. Las opiniones son encontradas, los policías conversan y custodian algunas calles, pero los robos continúan a diario.

“Me robaron 3 veces en 15 días, y al local de enfrente le pasó lo mismo”, declaró Ignacio Tulio, propietario de un local de ropa femenina de Juan B. Justo. Es decir que la situación es crítica ya que si bien la policía custodia las calles, los robos no cesan ¿Dónde está la falla por la que se filtran los robos? La policía sostiene que hace su mayor esfuerzo por controlar a quienes pasan por la avenida, pero sin lugar a dudas hay delincuentes que se les escapan. Muchas veces los asaltos han sido frustrados por el accionar de la policía pero generalmente, logran escapar con la recaudación y con mercadería que según los empleados, saben elegir muy bien.

¿Por qué la policía no consigue cumplir el objetivo de brindar seguridad en la avenida Juan B. Justo? ¿Quién se hace responsable de las constantes pérdidas que sufren los comercios? Preguntas y más preguntas que transitan la avenida de mañana, por la tarde y durante la noche, con respuestas inconexas que son robadas por los mismos delincuentes que la policía no puede controlar. Hace meses que Juan B. Justo parece zona liberada, avenida desprotegida, inmersa en un grave conflicto, más que nunca Fuera de Kontrol.